Mes Misionero Extraordinario

1 oct. 2019 | Sense categoria

Celebra hoy el Carmelo la fiesta de Santa Teresita, la Patrona de las Misiones. De parte de la Delegación de Misiones vaya nuestra felicitación a todo el Carmelo y de modo especial a cuantos Carmelitas se encuentran en tierras de misión llevando el Evangelio a sus gentes.

Comenzamos hoy el mes de octubre, mes por excelencia misionero. De todos es conocido que, con motivo de cumplirse el centenario de la promulgación de la primera carta apostólica misionera, “Maximum Illud” de Benedicto XV, el Papa Francisco ha convocado a la Iglesia a celebrar de manera especial este mes de octubre de 2019 como un Mes Misionero Extraordinario.

Con el lema: “Bautizados y enviados. La Iglesia de Cristo en misión en el mundo”,  el Papa nos muestra su deseo de despertar la conciencia de la “misión ad gentes” y retomar con nuevo impulso la responsabilidad de todos los cristianos de proclamar el Evangelio.

Aunque los responsables directos de organizar este mes misionero extraordinario son las Iglesias particulares, nosotros, Carmelitas, no podemos quedar al margen de esta iniciativa, dado que nuestra Orden no se entiende si le silenciamos el aspecto misionero. Los Consejos Generales de frailes, Calzados y Descalzos, reunidos en Dublin en mayo de este año también reflexionaban sobre nuestra identidad y nuestra misión hoy en la Iglesia y en el mundo. Y nos hicieron llegar su mensaje con el título: "somos misión, porque somos el amor de Dios comunicado", animándonos a "llegar a una comprensión más profunda de la misión, que no es principalmente lo que hacemos, sino lo que somos. Los carmelitas SOMOS misión"., nos decían.

Desde los comienzos nuestra Orden lleva innata la vocación misionera: Nacimos de las “ansias misioneras de Santa Teresa”. De sobra nos son conocidas sus palabras recogidas en el capítulo 1º del Camino de Perfección, donde llora de dolor por las noticias que le llegan sobre división protestante de la Iglesia de Europa. Dispuesta a “dar mil vidas” por la causa, se compromete a hacer lo que está en su mano: vivir con su comunidad los consejos evangélicos en toda perfección.

Y sus ansias apostólicas y misioneras cobrarán nuevos horizontes, cuando se encuentre con el P. Alonso Maldonado, misionero franciscano venido de “las Indias occidentales”, y le hable de las muchas almas que allí se perdían por falta de misioneros. A esas ansias misioneras el Señor le responderá con esa promesa: “Espera, hija, y verás grandes cosas”. Promesa que tendrá debido cumplimiento cuando el General le permita la fundación de nuevos conventos de monjas, y más tarde también de frailes. Su fiesta la celebraremos en el corazón de octubre, este mes misionero.

La figura de Teresa de Lisieux, cuya fiesta hoy celebramos, refuerza el carácter misionero de la Orden. En 1927, fue declarada por Pío XI, llamado el Papa de las misiones, Patrona universal de las misiones y de los misioneros, junto con S. Francisco Javier. Sobrados motivos encontró el Papa en la vida de Teresita para concederle este título, pues su entera existencia está marcada por numerosos gestos que ponen de manifiesto su ser misionero. Esa infancia en la que ya daba de sus pequeños ahorros unas limosnas para ayudar a las misiones, las oraciones que invirtió en la conversión del criminal Pranzini, esa sed de salvar almas de la que se sentía devorada años más tarde en el Carmelo de Lisieux, la oración y la ofrenda de sus dolores y sacrificios por los misioneros, su vocación de amor en la Iglesia, su deseo de seguir desde el cielo trabajando por la Iglesia y las almas, enviando “una lluvia de rosas”…    

Nos toca el turno a nosotros, herederos de ese legado maravilloso misionero. Y se trata de ver qué se puede hacer primero personalmente y después en nuestras comunidades, tan variadas y con tan diversas actividades pastorales, para incentivar nuestro espíritu misionero. En algunas de ellas hay grupos misioneros que ya encarnan con sus trabajos esta dimensión de forma eficaz y concreta. Otras se hallan comprometidas con proyectos de nuestros misioneros en África o América. Muy pronto celebraremos el día del DOMUND, con lo que implica de oración y colaboración económica por las misiones.

Es bueno, pues, que nos hagamos eco del llamado del Papa a reavivar nuestro espíritu misionero y a implicarnos todos de una u otra manera en esa tarea. Numerosas iniciativas aparecen en las miles de páginas de Internet de las que disponemos; algunas pueden servirnos a nosotros. Incluso el Vaticano ha sacado también esta página que añado para que a ella nos asomemos con interés de vivir de modo especial este Mes Misionero Extraordinario.

http://www.october2019.va/es.html