Desde la Comunidad OCDS de San José (en formación) ubicados en la parroquia diocesana de san Basilio el Grande, en Murcia, queremos comentarles cómo estamos llevando estos días de confinamiento. Ante todo, con mucha esperanza en nuestra Sra. del Carmen, aunque ya sabemos lo que tira la carne y la ‘cabecica’ que no para de traernos pensamientos inadecuados.
Desde el punto de vista de salud no nos podemos quejar, solo tenemos la madre de un hermano que está en una residencia en la que se han detectado algunos casos pero no a ella; por lo demás somos una Comunidad “relativamente joven”, creo que la media no pasa de los 60 años, por lo tanto es normal que estemos medianamente bien de salud.
En estos días no nos podemos reunir, como es sabido, y estamos relacionándonos por los medios de comunicación que tenemos al alcance, sobre todo por WhatsApp, tanto por medio de un grupo que tenemos de toda la comunidad como personalmente. Nos intercambiamos algunos textos de nuestros Santos Padres, Santa Teresa y San Juan de la Cruz, para su meditación y para compartir puntos de vista sobre los mismos. Además vamos intentando mantener, a título personal, la oración personal propia de nuestro estado.
Creo que nos está tocando vivir unos tiempos que, ahora sí, nuestra Santa Madre llamaría muy recios y sobre todo de mucha incertidumbre y esto visto tanto desde un punto de vista social como desde un punto de vista espiritual. Es esta una situación solo contemplada en las mejores películas de ciencia ficción.
Esperemos que dure poco y, sobre todo, que no desesperemos, que mantengamos nuestra llama ardiendo porque no dejemos “nuestra alma sola sin maestro".
Que Dios le bendiga Padre Miguel Marquez, y un saludo a todos los hermanos del Carmelo Descalzo.
Reciba un afectuoso y fraternal saludo de todos los miembros de esta su comunidad de San José, en Murcia.