COMUNIDAD DE SALAMANCA

28 Mar 2020 | Sin categoría

Pues…¡aquí estamos! Ajustando nuestra vida a las nuevas exigencias del guion que nos impone el Covid19. A partir del día 16 de marzo, suprimimos todas las actividades apostólicas: grupos de oración, charlas, misas y confesiones. Incluso las clases en la Universidad. El P. Jesús trabaja por internet y Pedro, el estudiante egipcio, hace lo mismo con las suyas. En este sentido el ritmo de trabajo, sigue siendo, más o menos, el mismo que el de antes del confinamiento.

Pero la verdad es que este retiro forzoso está siendo muy doloroso en el sentido de la compasión respecto a tantas personas que están sufriendo un verdadero cataclismo: contagios, residencias de ancianos, pequeñas empresas, familias enteras que pierden a sus miembros…etc

Así, pues, es bueno echar mano de la prudencia, fe y esperanza, que son nuestro escudo, y un poco de humor que, en este caso,  tomo de Cervantes cuando dice: "Todas estas borrascas que nos suceden son señales de que presto ha de serenar el tiempo y han de sucedernos bien las cosas; porque no es posible que el mal ni el bien sean durables, y de aquí se sigue que, habiendo durado mucho el mal, el bien está ya cerca".

Creo que esta situación, intentamos llevarla con ánimo y serenidad, confiando y estando tranquilos. A día de hoy gozamos de buena salud (o eso parece), y procuramos cumplir los consejos del protocolo de Sanidad. Bueno, cuando digo que gozamos de salud, no es del todo cierto, pues el P. Luis H. Bueno, lleva casi 20 días con una gripe tonta y molesta que se le ha complicado con las subidas del azúcar. Pedimos oraciones por él.

Pues lo dicho: ¡Que esto pase pronto para todos y con el menor coste posible!  Contad con nuestra oración y cariño.