Hoy es un día de profunda alegría para la Orden de los Hermanos Descalzos de la Bienaventurada Virgen María del Monte Carmelo, de la Provincia Ibérica. En la Delegación Provincial de Santa Teresa Benedicta de la Cruz, el Padre Celestine de Jesús ha realizado su profesión solemne, entrando de forma definitiva en la vida religiosa carmelitana.
La ceremonia tuvo lugar en presencia de numerosos miembros de la familia del Carmelo: hermanos carmelitas descalzos, sacerdotes diocesanos, así como religiosas y religiosos que se unieron a esta celebración de entrega y fidelidad.
La profesión fue recibida por el Padre Florent de la Inmaculada Concepción, delegado provincial, en un ambiente de recogimiento, fraternidad y acción de gracias.
Con este compromiso, el Padre Celestine se une plenamente a la Orden del Carmelo Descalzo, asumiendo los votos de castidad, pobreza y obediencia, en seguimiento de Cristo y al servicio del pueblo de Dios, bajo el amparo de la Virgen del Carmen.