Tercer día del Triduo en honor a Santa Teresa de Jesús

15 Oct 2024 | Sin categorizar

Juntáis quien no tiene ser
con el ser que no se acaba;
sin acabar acabáis,
sin tener que amar amáis,
engrandecéis nuestra nada


En esta estrofa, Teresa nos dice que Jesús, al juntarnos consigo, nos comunica su ser divino, ese “que no se acaba”, es decir, su vida eterna. “El que come mi cuerpo y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día”10 nos dice Jesús cuando nos invita a entrar en esa comunión con Él. Dice “tiene vida eterna”, en presente; es decir, que de alguna manera podemos ya vivir de esa vida sin fin. Es el cielo que se junta con la tierra, es ese “sin acabar acabáis” que dice aquí Teresa.

Para Teresa esta gracia de comunión que Dios hace es un exceso de amor para con nosotros al que no está obligado “sin tener que amar amáis”. Es la gratuidad de Dios en su plena manifestación. Y ese amor que se nos comunica es tan grande que lo que hace este amor es ensanchar nuestra capacidad, “engrandecer nuestra nada”, para que seamos capaces de recibirle y gozarle. Ese es el único deseo de Dios: engrandecer al alma, dirá San Juan de la Cruz, con quien tanto compartió Teresa.

Oremos: Santa Madre Teresa, ayúdanos a abrirnos a esa vida eterna que Jesús amorosamente quiere comunicarnos en el presente especialmente a través de la Eucaristía y por la cual quiere ensanchar nuestra capacidad de recibir.

Padrenuestro

Ave María

Gloria

V/. Santa Teresa de Jesús

R/. Ruega por nosotros