La Iglesia de los Padres Carmelitas Descalzos en Toledo ha recuperado el esplendor de sus capillas laterales gracias a una meticulosa intervención de restauración, liderada por el experto restaurador Miguel Bonache.
Esta acción fue impulsada por el Consorcio de Toledo, cuyo objetivo no solo fue restaurar su belleza original, sino también abordar y solucionar problemas estructurales, como las humedades, que amenazaban su conservación.
La restauración no solo ha sido un esfuerzo para mantener la estética y el arte de esta iglesia histórica, sino también para garantizar su preservación para las futuras generaciones. Este tipo de intervenciones son fundamentales para mantener vivo el patrimonio cultural, que sigue siendo un reflejo de la riqueza artística y cultural de la ciudad de Toledo.
Con esta acción, se asegura la permanencia y el resplandor de uno de los tesoros más importantes de la ciudad, que sigue siendo un símbolo de su legado histórico.