Con profundo dolor, pero con esperanza cristiana, comunicamos que esta mañana, 16 de septiembre de 2025, ha fallecido en Salamanca el Hermano Pacífico García Rodríguez (Pacífico del Niño Jesús), como consecuencia de un cáncer de pulmón, agravado por las dificultades respiratorias que ya padecía desde hace años.
El H. Pacífico nació el 30 de abril de 1946 en Monleras (Salamanca), como su pariente el P. José Vicente Rodríguez. Sus padres fueron Manuel y María Violante. Ingresó en el Seminario de Medina del Campo el 15 de septiembre de 1957. Allí cursó el bachillerato entre 1957 y 1961.
Tomó el hábito en Segovia el 12 de agosto de 1961, y profesó de manera simple el 15 de agosto de 1962. Estudió Filosofía en Ávila (1962-1967) y Teología en Salamanca (1967-1971), entre nuestro colegio teológico y el Instituto Teológico de Órdenes Religiosas (ITOR). Hizo la profesión solemne en Salamanca el 1 de mayo de 1971, y fue enviado a Roma, al Teresianum, donde cursó estudios de Espiritualidad (1971-1973).
A su regreso, pasó por varias comunidades: Madrid (c/ Triana), Medina del Campo, Almodóvar del Campo, y nuevamente Madrid, donde destacó por su servicio como secretario y administrador de la Revista de Espiritualidad, labor que desempeñó durante varias etapas. Entre 1979 y 1981 estudió también Magisterio.
Durante 22 años (1984-1996), el H. Pacífico vivió en Medina del Campo, donde fue administrador y profesor en el colegio San Juan de la Cruz, reconocido como un gran docente de lengua y literatura. Fue también secretario, director y representante titular del centro.
En 1996 fue destinado de nuevo a Madrid (c/ Triana), donde continuó su labor en la Revista de Espiritualidad, fue secretario provincial (2003-2005) y responsable del Boletín Oficial de la Provincia de Castilla (2014-2015). Desde 2020 residía en la comunidad de Salamanca, donde ha fallecido.
El funeral se celebrará el jueves 18 de septiembre a las 11:00 h en nuestra iglesia de Salamanca, tras lo cual su cuerpo será inhumado en el cementerio.
Nos unimos en la oración con la comunidad de Salamanca, y damos gracias a Dios por la vida del H. Pacífico, religioso fiel, servidor incansable y hermano entregado al Carmelo y a la Iglesi