«La mayor satisfacción la encuentro cuando alguien me dice que ha llegado a conocer, a valorar o a leer a Teresa de Jesús gracias a este blog»

4 Dic 2023 | Actualidad

Hoy entrevistamos a la Hna. María José Pérez, carmelita descalza del monasterio de Puçol, autora del blog De la Rueca a la Pluma que este año ha cumplido 10 años de actividad.

¿Cómo surgió la iniciativa del Blog?

“Teresa, de la rueca a la pluma” nació a raíz de una petición que nos llegó por parte de Juan M. Borrego —responsable de comunicación del V Centenario del nacimiento de la Santa—, a finales de 2012. La idea era crear un blog que de algún modo dinamizara la página “Para vos nací”, que era como se titulaba la web del V Centenario.

Esta propuesta vino a sumarse a algo que yo veía en ese momento como muy necesario: una página de Internet dedicada a Teresa de Jesús, donde encontrar recursos que ayudaran a quien quisiera saber más sobre ella. Por eso, pensé que podían unirse ambos proyectos en uno.

Asumimos el reto, y el 1 de febrero de 2013 salía al ciberespacio “Teresa, de la rueca a la pluma”.

En aquel primer momento, el blog estaba muy vinculado a las actividades del V Centenario del Nacimiento de santa Teresa. ¿Cómo fue la evolución del Blog tras la efeméride?

Sí, el V Centenario era una fuente continua de noticias sobre la Santa. Recuerdo un día que publiqué hasta cuatro entradas, porque ninguna de las novedades que me llegaban me parecía que debía quedarse sin salir. Cuando terminó el V Centenario cambiamos el diseño del blog (para adoptar el que ahora tiene) con el fin de convertirlo en una página que pudiera funcionar con independencia de las noticias, una página de recursos y materiales teresianos, aunque también tenían cabida las noticias, dentro de la sección “Actualidad”.

Ahora los temas son mucho más amplios, sin perder todo lo teresiano. ¿Cómo se organiza para poder llegar a todas las novedades que comparte?

Después de tantos años de experiencia, me resulta fácil localizar las novedades que pueden interesar a los lectores del blog. Con todo, a diario he de dedicar algún rato a revisar los medios, y extraer materia para las publicaciones. También hay gente que me envía noticias cuando las encuentra (o las genera). Hay quienes ya conocen el blog y saben que es una plataforma útil para divulgar contenidos teresianos, así que me hacen llegar la información.

En este mismo sentido, ¿Qué temas son los que más cree que interesan a sus lectores?

Todo lo relacionado con nuestros Santos es de interés, tanto desde el punto de vista espiritual como desde el cultural o incluso académico. A mí no me interesaba un blog puramente devocional, sino una página que pudiese también atraer a un conjunto amplio de personas interesadas en Teresa de Jesús como mujer de su tiempo, como escritora y como fuente de inspiración en las artes y otras manifestaciones culturales.

¿Cuál es la mayor satisfacción al ver la fidelidad de la comunidad que ha creado?

La mayor satisfacción la encuentro cuando alguien me dice que ha llegado a conocer, a valorar o a leer a Teresa de Jesús gracias a este blog. Eso no se paga con nada.

¿Qué le diría a aquellas personas que aún recelan de estar presentes en el mundo virtual?

Sí, todavía hay quienes consideran que Internet es un peligro para la vida contemplativa: “Demonio, demonio”, como le decían a Teresa. Internet no es el problema, como no lo es la televisión, el teléfono o los libros. El problema está en los criterios de su uso, en cómo educar la libertad para que no se convierta en una vía de escape o en una adicción. Si la persona está centrada, usará de todo con mesura, y de todo sacará provecho. Pero está claro que no podemos vivir de espaldas a la historia y a sus avances. Teresa fue una mujer de su tiempo, y se sirvió de los recursos más eficaces que encontró para llevar adelante su obra.

¿Tenemos “De la Rueca a la Pluma” para rato?

Por mi parte, no tengo aún prevista la jubilación. Mientras Teresa de Jesús, Juan de la Cruz y el resto de figuras del Carmelo sigan suscitando interés entre la gente, creo que vale la pena que seamos nosotros (nosotras) quienes facilitemos ese encuentro y ayudemos a darlos a conocer de la mejor manera posible.