El 12 de diciembre se celebró en Úbeda el segundo día del Triduo en honor de San Juan de la Cruz, una jornada marcada por la cercanía, la oración compartida y la profunda participación de la comunidad cristiana. La celebración eucarística estuvo presidida por el Padre Miguel Márquez Calle, Prior General de la Orden de los Carmelitas Descalzos, en el templo de San Miguel.
Acompañó el servicio litúrgico la Cofradía del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, cuya sede canónica se encuentra en el convento de los Carmelitas Descalzos de Úbeda, subrayando así la estrecha vinculación entre la vida religiosa, la piedad popular y la historia espiritual de la ciudad.
Al término de la Eucaristía tuvo lugar un momento especialmente significativo con la bendición de una nueva obra pictórica dedicada a Santa Teresa del Niño Jesús, realizada por el artista Santiago Ibáñez, creador contemporáneo de la tierra de Jaén. La pintura, encargada expresamente por la comunidad carmelita, ofrece una interpretación personal y profunda del rostro de la santa y ha sido colocada al final de la nave del Evangelio del templo de San Miguel. La obra despertó una notable admiración entre los fieles por la sensibilidad, el gusto y la hondura con que el autor ha sabido recrear la figura teresiana.
Durante toda la jornada, el Padre General destacó, una vez más, por su cercanía en la predicación, en la celebración litúrgica y en el trato personal. Tras la Eucaristía, saludó uno a uno a los fieles presentes, mostrando su agradecimiento por la acogida recibida y quedando gratamente impresionado por la amabilidad y el cariño del pueblo de Úbeda hacia la comunidad carmelita.
A lo largo de su estancia, el Prior General compartió varios momentos de convivencia con la comunidad, incluyendo dos cenas y un día completo de presencia en la ciudad. Este tiempo le permitió dialogar con los hermanos, pasear por Úbeda, conocer mejor su entorno, conversar con las Carmelitas Descalzas y acercarse de manera sencilla a la vida cotidiana de la comunidad.
La comunidad de Carmelitas Descalzos de Úbeda da gracias al Señor por este paso del Padre General por la ciudad, vivido como un verdadero regalo de fraternidad, comunión y acompañamiento en el marco de las celebraciones en honor de San Juan de la Cruz.