En este día se repite el esquema semejante a todas partes: Eucaristía, procesión y Bendición. Sin embargo, notamos algunos detalles: De la comunidad con los PP. Francisco J. Jaén Toscano (prior) y Francisco V. López Fernández, asistía el aspirante a Carmelita Descalzo D. Edgardo Largaespada Silva, revestido de alba, y sirviendo el altar junto a los seminaristas locales. El Seminario Menor junto con el Seminario Mayor San Pelagio y el Seminario Mayor RedemptorisMater, acompañaron con sus voces la celebración eucarística y procesional ejecutando una buena gama de temas teresiano-sanjuanistas. Seguidamente, se organizada la procesión con el Santísimo, en la custodia de Arfe.
Fue acompañado por tres bandas de música: Caído-Fuensanta, Tubamirum y Esperanza. Esta última interpretó la marcha del compositor Germán Álvarez Beigbeder, dedicada y denominada “Santa Teresa de Jesús”, a su paso por el altar (el décimo, de los once existente) de la Archicofradía de Carmen de San Cayetano, ubicado en la fachada del templo de nuestras monjas de Córdoba; poco antes, se oían las voces de los seminaristas con el canto “Nada te turbe”.
Este año aparece la Virgen del Carmen de nuestra sacristía conventual y un busto relicario de Santa Teresa de Jesus del s. XVII, que nos han cedido nuestras queridas Madres Carmelitas Descalzas de Santa Ana, que cuenta con reliquias de primer grado como un colmillo y carne de nuestra madre fundadora.
Un guiño a la apertura histórica del sepulcro que tendrá lugar este año. Y en este mismo lugar, próximo a la Mezquita-Catedral, sedespidieron los Religiosos Carmelitas de la procesión acompañando a la Cofradía del Carmen desde su Altar.